11 de septiembre de 2018

EL SILBO GOMERO





                    EL SILBO GOMERO

   Ya metidos en harina con el tema de las lenguas de los países (o lo que sean) de este País y la tan traída y llevada, Inmersión Lingüística (que no es que metan la cabeza del alumno en un balde de agua en el aula y que no se la saquen hasta que sepa hablar, al menos, en nivel C2 el idioma autóctono de la comunidad autónoma bilingüe de turno, no es eso, nó), Rebocato sugeriría, por ejemplo, a los responsables del  Gobierno de Canarias (y canarios) que, así como hizo en su día el Govern de les Illes Balears con el idioma Catalán/Mallorquí, podrían también –con el fin de que no se pierdan las lenguas vernaculas de las Islas Canarias– el asacar una Ley en la que se considerara como obligatorio a todos los médicos de Canarias que quieran ejercer, y seguir ejerciendo, la Medicina en la Isla de La Gomera el acreditar que disponen del certificado de lenguaje del Silbo Gomero: “Nivel de suficiencia C1”, porque es una pena que se pierda esa forma de comunicarse y, además, entre más idiomas sepamos (aunque sean silbados) mejor que mejor. Las horas lectivas a dedicar por los alumnos al aprendizaje del Silbo Gomero, se sacan de cualquier sitio a lo largo del curso, poniendo voluntad y dedicación para con el aprendizaje. 


    De esa manera en el caso de que, un enfermo gomero no pueda desplazarse –por falta de movilidad física– desde su domicilio hasta la consulta, “no problem” (que bonito es saber idiomas),  como el sonido del Silbo Gomero tiene un alcance de escucha de unos tres kilómetros a la redonda y entre barrancos, el paciente abriendo la ventana de su casa y el galeno la de su consulta, podrían pasar consulta médica a base de silbidos, sin apenas moverse de su sitio, ni el uno ni el otro. Optimación de recursos total y absoluta.


  


Pie de video.- A ver si entre todos conseguimos que no se pierda el Silbo Gomero.

    Que no les pase a los canarios de Canarias, como con el idioma guanche que fue eliminado por la invasión y conquista por la Corona de Castilla (fijo que, algún galego, astur, leonés, vascuence y/o catalá habría rondando y haciendo piña con los castellanos conquistadores) en el siglo XV, los aborígenes tuvieron que adaptar el Silbo al idioma castellano. ¿Evolución de las lenguas?.

    Como el Silbo Gomero tiene ese gran alcance de percepción, las aulas que se dedicaran al aprendizaje de él podrían ubicarse, mínimo, a una distancia de 6 Km. unas de otras, al fin de evitar cruces de conversaciones y, otra ventaja añadida sería que, los alumnos podrían ayudar en las labores campestres –u otros trabajos familiares– a la vez que aprendieran el Silbo, porque oirían la impartición de clases como oyentes sin necesidad de estar presentes, físicamente, en el aula.


     PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD

    El Silbo Gomero no es un silbato (que podría serlo, también) hecho artesanalmente en la isla de la Gomera, sino un lenguaje silbado –utilizando la boca y los dedos–. llevado a la práctica por los silbantes habitantes de la isla de la Gomera con el fin de comunicarse entre ellos entre barrancos.

    No sabemos si, por ejemplo, estando un gomero labrando en el campo y tiene que comunicarse silbando, si se lavará previamente las manos antes de ponerse a platicar introduciéndose los dedos en la boca. Aquí le viene a Rebocato a la memoria que cuando, él, en nuestro pueblo castellanoviejo tiraba de hoz para segar: Ceburro, cebada, centeno o garbanzos, a la hora de almorzar no se lavaba las manos, el agua de las botijas era un bien preciado para calmar la sed, no para remilgamientos que no venían a cuento en aquel lugar y tiempo.

   Igualmente ignoramos si, en las dos Universidades públicas (en las tres privadas donde van alumnos de padres ricos, barruntamos que nó) de las Islas Canarias, imparten las clases en Silbo Gomero, y si nuestra Constitución ampara el que el catedrático o profesor de turno pueda elegir entre disertar en las aulas en idioma Castellano o en Silbo Gomero, como ocurre en otras comunidades autónomas bilingües del País de los Godos con sus idiomas autóctonos de turno.

   Tampoco sabemos si en las competiciones deportivas que se celebran en La Gomera, si para silbar a los rivales y/o a los árbitros, los gomeros si lo harán con silbidos –tal y como se hace en el País (o paises, no tengamos un lío) de los Godos)– o bien, si tendrán su propia manera de silbar en Silbo Gomero a la hora de protestar o amedrentar a los deportistas rivales y árbitros. 

  El Silbo Gomero fue declarado “Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad” en 2009 (por nombre de denominación que no quede) por la UNESCO. Es el único idioma silbado con esta distinción y es obligatorio impartirlo en todas las escuelas de La Gomera en Primaria, y optativo en Secundaria.


     EN LAS AULAS DE PARIS:

       El día 22/08/2018 vio Rebocato en el periódico digital  eldiario.es  publicada la siguiente noticia:

<El proyecto de Enseñanza de Silbo Gomero amplía fronteras en el colegio parisino Pierre Budin, con un proyecto didáctico que incluso ha sustituido por frases en silbo el timbre de entrada y salida a clase> . 

     Los escépticos pueden comprobarlo en el enlace siguiente:




Pie de foto.- El maestro silbador impartiendo el Silbo en la escuela de Paris. Esperemos que no le silben mucho (o sí) sus alumnos.


  En fin, por algo se empieza para potenciar internacionalmente nuestros idiomas de por aquí. De momento solo lo utilizan para avisar las entradas y salidas de las aulas a los alumnos en el mencionado colegio de Le France, pero, démonos tiempo, los inicios del idioma de la pérfida Albión también fueron duros, pero miremos ahora donde se encuentra, es el idioma comercial de todo el orbe por excelencia.


        MAREANDO LA PERDIZ

   Mientras los padres y madres (HAMPA) profesores y alumnos de la gente de a pie, intercambiaban impresiones sobre la mejor manera de seguir las modas políticas que asolan a la piel de toro (excepto a Portugal) de Estrabón,  que consisten en meter con calzador las lenguas madres (hay comunidades autónomas que si solo aprendes el castellano cuando llegas a la Universidad el profesor o catedrático de turno te imparte la clase en el idioma autóctono –le ampara la Constitución– y el alumno queda en plan de: “Te jodes y bailas”, eso sí, tampoco se le obliga a irse a plantar la era a una Universidad de otra Comunidad Autónoma castellanoparlante y no bilingüe, previa búsquedas de alojamiento en Colegio Mayor, piso compartido, apartotel o debajo de un puente por falta de recursos económicos de sus padres. Total, S
sobran supertitulados en el Pais de los Godos.

   Y mientras tanto los pudientes poderosos –económicamente hablando– enviaban a sus “pobres” niños a colegios de élite donde se impartían la clases en: Inglés, Castellano y Alemán. El idioma autóctono ya lo aprenderían en casa.

  Recalcar que el aprender el idioma autóctono (sin gran proyección internacional, pero démonos tiempo, los inicios siempre son duros –el inglés hace millones de años nadie lo hablaba, según demuestran los documentos no escritos y no encontrados, y ahí está como la Puerta de Alcalá: viendo pasar el tiempo–) es voluntario, como Rebocato cuando laboraba; todos los días de currelo, bien tempranito, se encaminaba al curro, la Guardia Civil no iba a buscarle a su casa para llevarle al tajo de la oreja; y cuando de adolescente, en vacaciones, tiraba de hoz (incluso los domingos, excepto a la hora de acudir a oír la Santa Misa en la iglesia de nuestro pueblo castellanoviejo) tampoco era obligatorio el ir a segar, pero nuestro labriego castellanoviejo disponía de un buen cinto de basto cuero y de una rapidez extrema para quitárselo, sacudir y colocárselo de nuevo, sin darle tiempo a que sus pantalones –de pana gorda y negra– se le cayeran posaderas abajo. El cinto por lo tanto, era un buen medio (tanto como el venidero madridista Modric) disuasorio por si uno se negaba a doblar el lomo (y no el de la fiambrera del almuerzo o merienda, precisamente).

   Por citar un ejemplo sobre el aprendizaje idiomático decir que, a las hijas de nuestro amigo les vino muy bien lo de la inmersión lingüística. Comentaban los padres y madres de alumnos y alumnas en el colegio, que la Inmersión era buena porque así los niños, de mayores, encontrarían mas fácilmente trabajo en la comunidad bilingüe autónoma de turno a la hora de incorporase al mercado laboral. Resultando que, años después, muchos titulados con la crisis de marras, tuvieron que emigrar allende las fronteras del Estado a trabajar a salva sea la parte. Ahora bien a las hijas de Rebocato estando ellas en otros países de Erasmus, beca Leonardo o de perfeccionamiento del idioma ingles en England, les vino dabuten el idioma autóctono para hacer Skype con su abuela materna y así platicar practicando el idioma autonómico y, de paso, lo potenciaban internacionalmente al hablarlo con su abuela delante del ordenador y de otros erasmistas bárbaros, compañer@s de morada que anduvieran pululando por el comedor. 


LA REUNIÓN DE INSTITUTO

   Años ha, nuestro amigo Rebocato tuvo que asistir a una reunión de padres y/o madres de alumnos a un instituto de la capital bilingüe donde moraba y mora. Su contraria (que era la que solía acudir a esos eventos) no pudo asistir ese día por motivos laborales. Una vez todos los padres, madres, tutores, abuelos y abuelas, etc. dentro del salón de actos, el Director del Instituto –en el estrado y bien acompañado por otros profesores– era amigo de un amigo y, este a su vez, compañero de trabajo de nuestro amigo Rebocato, y aquellos dos amigos originarios de un mismo pueblo  del interior de la provincia. El Director empezó la asamblea disertando sobre lo divino y lo humano en su idioma autóctono. Al rato se levantó una mujer menuda que, por el acento y la fisonomía, parecía ser originaria de un país latinoamericano, mayormente, barruntaba Rebocato, del sur de America, Y dijo al director: 

     –¿Por favor, podría hablar en español? Es que yo el idioma autonómico de aquí no lo entiendo.

   El Director no se cortó un pelo y respondió: 

   –Señora, yo hablo en mi lengua materna con el fin de potenciarla y voy a seguir hablando en ella”.

   La mujer dijo: 

   –Pues entonces yo abandono la reunión porque, es que no me entero de "nada" ("res" para los bilingües, y no es una vaca). Buenas tardes.

  Otra media docena de personas, y Rebocato también, abandonaron el salón de actos.

   Al salir l intransigente Rebocato rumiaba para sus adentros: “La primera y la ultima. No me pillan en otra reunión”.

   Reseñar que, el Director del Instituto, no hizo nada fuera de la ley. 

   Rebocato al día siguiente, en el trabajo, se lo comento a su amigo –y a la vez, este,  amigo, también, y paisano, además del Director del Instituto–, y el compañero (aunque era un defensor a ultranza de la seua llengua autonómica) le dio la razón a nuestro amigo. 

   En fin, en este País imperan (unas mucho más que otras) 17 autonomías y 17 sistemas educativos diferentes. Humm.. ¿Los reinos de Taifas?.

Según una noticia aparecida en el diario El Mundo del día 8 de septiembre de 2018:

España funciona de facto con 17 sistemas educativos diferentes. Cada uno con su currículo particular, con su normativa diferenciada y su peculiar forma de financiación. Así, al menos, lo denuncia la Asociación Nacional de Editores de Libros que señala a la actual ley educativa, la Lomce, de ser la responsable de que existan 17 ediciones específicas para cada materia y para cada curso. En total casi 11.000 libros de texto distintos. Una realidad que da cuenta del fracaso colectivo que representa la Educación en nuestro país, donde cada comunidad autónoma utiliza las herramientas que le permite una ley mal concebida para encargar libros a la carta que recojan elementos de su identidad regional en materias tan poco dadas a la interpretación como las matemáticas. Al menos, un 30% del contenido de los libros de texto es diferente en cada autonomía”.


     El que quiera más detalles al respecto, puede abrir el siguiente enlace:

http://www.elmundo.es/opinion/2018/09/08/5b92bb5ce5fdea20578b4634.html


PD.-Esperamos que los amigos autonómico/bilingües de Rebocato no nos lo crucifiquen por enviar esta  cansina misiva. Pero ¿merece la pena crear un posible mártir castellanoviejo  que, además, es auto exiliado desde hace décadas?.

 

        HistoriasdeRebocato @septiembre-2018